Por Agostina Alcalá
En la Catedral Basílica, decenas de fieles se acercaron para rezar y seguir de cerca el inicio del cónclave en el Vaticano, donde los 133 cardenales electores decidirán quién será el próximo Papa. Para muchos, esta elección no es solo un evento lejano, sino un momento profundamente espiritual que los conecta con la Iglesia universal.
“Venimos a rezar para que el Espíritu Santo guíe a los cardenales. Queremos un Papa que nos acerque más a Dios y siga el camino de Jesús”, expresó emocionado el padre Diego, uno de los sacerdotes presentes en la Catedral. “Es un momento de fe, de esperanza. Los salteños estamos unidos en oración”, agregó.
Entre los fieles, María, una devota habitual de la Catedral, expresó su deseo: “Que sea alguien que nos guíe como lo hizo Francisco, con humildad y amor por los pobres”. Para ella, la elección de un nuevo Papa es una oportunidad para que la Iglesia siga siendo una guía espiritual en tiempos de incertidumbre.
Otro testimonio fue el de José, un servidor del santuario, quien recordó que el nuevo Papa no solo representa a los católicos, sino a toda la humanidad. “El Papa debe ser un guía para todos, no solo para los que estamos dentro de la Iglesia”, afirmó.
Incluso los más jóvenes se sumaron a la jornada de oración. Sofía, de 17 años, dijo estar emocionada por la posibilidad de que el nuevo pontífice siga promoviendo la inclusión y la paz, como hizo Francisco. “Me gusta que haya cardenales de todo el mundo. Es un signo de que la Iglesia es de todos”, comentó.
La Catedral Basílica de Salta se ha convertido en un punto de encuentro para aquellos que desean acompañar este proceso histórico con su oración y esperanza. A medida que avancen los días y el humo blanco anuncie la elección del nuevo Papa, los salteños seguirán rezando por una Iglesia que continúe su misión de fe y servicio.
Fuente: El Tribuno | Salta