El incremento de hechos violentos en Orán vuelve a estar en el centro del debate tras un violento episodio de inseguridad ocurrido el lunes por la tarde en el centro de salud Juan Taranto, ubicado en el barrio 1º de Mayo. Dos hombres armados ingresaron al establecimiento, atacaron al personal sanitario y robaron pertenencias en pleno horario laboral.
El ataque, registrado a las 14.20, comenzó cuando los delincuentes irrumpieron en el sector de Atención Primaria de la Salud (APS) con un hierro como arma. Las trabajadoras sanitarias presentes lograron esquivar los golpes y huyeron hacia la calle, mientras los agresores se apoderaban de sus teléfonos celulares. La escena quedó registrada en las cámaras de seguridad de vecinos, quienes reportaron que los malvivientes habían estado merodeando por el lugar desde el mediodía, esperando el momento oportuno para cometer el ataque.
A pesar de que las autoridades habrían identificado a los responsables, hasta el momento no se ha informado sobre detenciones. Este incidente revive la preocupación de los trabajadores sanitarios y de los vecinos, quienes denuncian que el centro de salud opera sin una consigna policial permanente, a pesar de estar ubicado en una zona considerada de alto riesgo.
Declaraciones del médico Iván Moyo
Iván Moyo, médico del centro de salud Juan Taranto, brindó detalles sobre la situación que atraviesan: “El centro de salud no cuenta con cámaras de seguridad. Hemos pedido una consigna policial el año pasado por los hechos de violencia y no nos la dieron. Estamos temerosos de que pueda ocurrir algo más grave”.
Según explicó, los agentes sanitarios realizan trabajo de campo visitando domicilios y enfrentan constantes amenazas. “Ellas tienen miedo de declarar o hablar de este tema. Hoy les dimos el día libre por la situación que vivieron“, añadió Moyo. Además, describió al barrio como un lugar conflictivo, donde los hechos de violencia suelen estar vinculados al consumo de estupefacientes y alcohol. “Estos individuos agreden al personal y también a los pacientes que vienen a atenderse”, denunció.
El médico también mencionó que, tras presentar la denuncia, no hay consigna policial para evitar más hechos de inseguridad como el ocurrido. “No hay ninguna acción concreta por parte de la Policíaa, no se tomó ninguna medida. El centro de salud parece más una cárcel por la cantidad de rejas que tiene, y aun así los robos y la violencia continúan”, lamentó.
Un problema recurrente
El centro de salud Juan Taranto cumple un rol crucial, no solo para los vecinos del barrio que lleva su nombre, sino también para otros tres barrios cercanos. Sin embargo, sus trabajadores y pacientes enfrentan una situación de vulnerabilidad constante debido a la inseguridad en la zona, donde los enfrentamientos y robos son habituales.
“No se puede trabajar así; en cualquier momento puede terminar en una tragedia”, declararon en conjunto los profesionales de la salud afectados. Además, recordaron que este no es el primer episodio de violencia que sufren, lo que genera temor y un ambiente laboral insostenible.
Reclamos y acciones comunitarias
Ante la gravedad del hecho, los vecinos del barrio Taranto decidieron organizar una colecta para reforzar la seguridad del centro con la instalación de rejas adicionales. Sin embargo, tanto los trabajadores como los vecinos coinciden en que estas medidas no son suficientes y exigen la asignación de una consigna policial permanente. “Trabajar sin seguridad es imposible. Estamos en peligro constante, y esto afecta nuestra capacidad de atender a quienes más lo necesitan”, expresó el médico Moyo.
La comunidad también solicitó a las autoridades locales y provinciales que tomen medidas urgentes para garantizar la seguridad de los centros de salud y de las personas que dependen de sus servicios. La inseguridad, aseguran, no solo pone en riesgo la vida de los trabajadores, sino también la de los pacientes que acuden en busca de atención.
Fuente: El Tribuno | Policiales