El ministro de Seguridad y Justicia, Marcelo Ramón Domínguez, presidió junto al jefe de Policía, Miguel Ceballos, y el subjefe Pablo Vilte la ceremonia por el Día del Policía Caído en Cumplimiento del Deber y por la COVID-19. Tuvo lugar en Plaza de Armas de Jefatura Policial.
Se hizo un especial homenaje a los 45 hombres y mujeres caídos en servicio o por COVID-19 con la presencia de familiares y allegados. Recibieron un reconocimiento especial y participaron de la ofrenda floral, acto de salva, bendición religiosa y minuto de silencio en su honor.
Al hacer uso de la palabra, el ministro Domínguez destacó “el valor, el coraje, la firmeza y el profesionalismo de aquellos miembros de la Fuerza de Seguridad que al honrar el juramento realizado entregaron hasta su vida en cumplimiento del orden y de la paz social”. En ese marco, a los familiares presentes les recordó que la Policía de Salta “es su casa y que las puertas siempre estarán abiertas para recordar a los caídos que son ejemplos para todos”.
El Jefe de Policía enfatizó: “Hoy queremos enaltecer a mujeres y hombres que cubrieron de gloria el uniforme azul, modelos de heroísmo y guías eternas para nosotros y futuras generaciones de policías. Sus sacrificios no fueron en vano porque sus legados quedarán perpetuados en nuestras memorias para siempre”.
Al concluir el acto se hizo el descubrimiento de placas con los nombres de los 45 miembros de la Policía de Salta.
El año pasado se instituyó los 26 de septiembre como el Día del Policía Caído en Cumplimiento del Deber y fallecidos por COVID-19 por resolución de Jefatura Policial y homologado por el Ministerio de Seguridad y Justicia.
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