Un tsunami sacudió el Autódromo de Monza el domingo y fue el fervor generado por el debut de Franco Colapinto en la Fórmula 1. El argentino cumplió con una gran labor en su estreno, que fue nada menos que en el Gran Premio de Italia, donde terminó en el 12º puesto luego de partir 18º. Terminada la carrera, un centenar de hinchas fue a buscar al corredor pilarense, que disfrutó del cariño de la gente.
La presencia de Colapinto generó una revolución en el mítico circuito inaugurado en 1922, que aún conserva el óvalo en el que en los años cincuenta y sesenta llegó a correr la F-1, combinado con el dibujo actual.
El carisma del piloto bonaerense, de 21 años, le valió hacerse querer por la gente y eso lo demostró en el muro de boxes, donde un centenar de argentinos se acercó para que el piloto les firmara banderas, camisetas de la Selección Argentina y de Boca Juniors, el equipo del que es hincha Colapinto.
Luego regresó a la parte interna de los boxes Franco fue saludado por un mecánico de Williams quien lo felicitó: “Franco! Buen trabajo. Bien. Completo el día”, y luego usó una metáfora para definir lo bien que anduvo arriba del auto y le dijo “tu juego es ‘volar’”. Acto seguido, le recordó que “allá tienes ruido”, por los hinchas que siguieron gritando por el argentino. Franco lo tranquilizó y le dijo “voy a ir a ver a mis fans”. Y el miembro de Williams le insistió: “Franco, por favor volvé a salir porque están como locos. Nunca vi algo así en la Fórmula Uno”.
“Estábamos yendo en el desfile con Lando (Norris) y Leclerc y decían ‘hay más banderas argentinas que de Ferrari. Están completamente locos. ¿Qué está pasando?’ Y gritaban ¡Franco!’”, contó el representante Albiceleste en diálogo con ESPN.
“Una locura total, eso es lo que me ayudó a llegar adonde estoy hoy, por los fanáticos argentinos y la gente que me apoya hayan empujado conmigo”, destacó el piloto de 21 años que se estrenó con un Williams FW 46.
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