“El Inodoro de la Paz”: Una propuesta legislativa que da que hablar

En un giro inesperado, la diputada Viviana Guzzo, de Unión por la Patria, presentó un proyecto que promete cambiar la forma en la que vemos al más humilde de los rincones del hogar: el inodoro. Sí, leyó bien. Bajo el lema “El retrete es un lugar para la paz”, Guzzo propone que el inodoro sea declarado de interés legislativo provincial. ¿Estamos ante un nuevo amanecer en la política o simplemente ante el proyecto más curioso del año?

La legisladora no se anda con rodeos. En el texto del proyecto, asegura que el inodoro no es solo un lugar donde se hacen necesidades biológicas, sino un verdadero bastión de la paz, la dignidad y la higiene. Y para reforzar su argumento, se apoya en nada menos que la Organización de las Naciones Unidas, que reconoce el saneamiento como un derecho humano. Porque si hay algo que une a la humanidad, sin importar raza, credo o color político, es la necesidad de un baño limpio y funcional.

El Inodoro: Lugar de Paz, protección y progreso

Pero el proyecto no se detiene ahí. Inspirado en las líneas de acción propuestas para el Día Mundial del Inodoro 2024, Guzzo postula al trono de porcelana como:

  1. Un lugar para la paz: Porque, seamos sinceros, ¿dónde más puede uno reflexionar en calma y meditar sobre los grandes misterios de la vida?

  2. Un lugar de protección: Especialmente contra los horrores de un baño público sin papel higiénico.

  3. Un lugar para el progreso: ¿Cómo podríamos avanzar como sociedad si no resolvemos primero los problemas básicos del saneamiento?

Más allá de la tapa

El proyecto también señala que la falta de acceso a instalaciones sanitarias adecuadas afecta de forma desproporcionada a mujeres y niñas, lo que vulnera sus derechos y oportunidades. Aunque este punto es indiscutible y de suma importancia, no podemos dejar de notar que el enfoque inicial del “inodoro como lugar de paz” tiene un toque tan solemne que resulta casi poético.

Por otro lado, la propuesta resalta que sistemas de saneamiento dañados o inadecuados pueden desencadenar problemas de salud pública graves, algo que efectivamente debería ser una prioridad. Ahora, ¿era necesario llamarlo “El Retrete de la Paz”? Tal vez no, pero no se puede negar que el título capta la atención.

¿Un Proyecto con impacto o solo humor involuntario?

Si bien el tono puede generar risas nerviosas, el fondo de la cuestión es serio: garantizar sistemas de saneamiento adecuados es una necesidad básica y una deuda histórica en muchas regiones. Quizás Guzzo encontró en este enfoque una forma novedosa de poner un tema tabú en el centro del debate legislativo. Porque si algo tiene este proyecto es que, como mínimo, no pasa desapercibido.

Fuente: El Tribuno | Política