El G20 Social pide medidas contra el hambre

Organizaciones y movimientos de la sociedad civil de los países miembros del G20 pidieron ayer en Río de Janeiro, en la denominada Cumbre Social, intensificar la lucha contra la crisis climática y redoblar esfuerzos para erradicar el hambre.

El evento precede a la Cumbre de Líderes del G20, que reunirá mañana y pasado a los jefes de Estado de las mayores economías del mundo en la icónica ciudad brasileña.

En la declaración final del G20 Social, los líderes de la sociedad civil enfatizaron la necesidad de avanzar hacia un futuro “inclusivo, sostenible y resiliente”, destacando la urgencia de implementar soluciones colectivas frente a los desafíos globales.

En este sentido, señalaron que las acciones prometidas deben traducirse en medidas “concretas” e “inmediatas”.

“Los acuerdos no pueden quedarse en el papel; el mundo necesita una acción decidida ahora”, destacaron en el documento, donde también recalcaron la urgencia de combatir la desigualdad social y garantizar la soberanía alimentaria.

Puntualmente, las organizaciones y movimientos no gubernamentales pidieron un mayor compromiso para “mitigar el cambio climático” y solicitaron mayores esfuerzos y acciones para reducir las emisiones de carbono mediante el fomento de energías renovables y el apoyo a las comunidades vulnerables afectadas por la crisis climática.

En la declaración también hicieron un llamado para que, de forma “urgente y como prioridad máxima e imperiosa”, todos los países miembros del G20 y otros Estados del mundo se unan a la Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza, una iniciativa del presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, impulsada en el marco del foro para garantizar el acceso universal a la alimentación.

Esta Alianza se lanzará mañana y nace con compromisos concretos de 39 países y 30 organizaciones internacionales para beneficiar a unos 500 millones de personas.

La lista de 39 países incluye a patrocinadores y beneficiarios de las ayudas, que son naciones en desarrollo de África, América y Asia que inscribieron en la Alianza una cartera con alrededor de 40 proyectos contra el hambre.

Las autoridades brasileñas, que ofrecieron detalles de los proyectos, no aportaron cifras del monto de las ayudas comprometidas. No obstante, aseguraron que estos compromisos muestran que la entidad no es una simple declaración de intenciones ni un nuevo organismo de ayuda internacional con funciones limitadas.

Impuesto a los ricos

Los líderes de la sociedad civil también defendieron que se adopte un impuesto mundial a los superricos para reducir las desigualdades, pidieron por la reforma de una gobernanza mundial con mayor participación de los países del sur global y pidieron a los Estados miembros combatir la desinformación y fortalecer las instituciones democráticas frente a las crecientes amenazas autoritarias.

La adaptación de los mercados laborales a la era digital, con énfasis en empleos dignos, protección social para los más vulnerables y el fomento de la cooperación internacional, fueron otros aspectos destacados en el texto, que además pide reforzar el compromiso mundial con la inclusión social y la equidad de género.

Fuente: El Tribuno | Internacionales